

Su interés por la radiónica se despierta cuando un vecino, el Dr. Pack y amigo de la Guardia Nacional, le pide ayuda para montar un equipo médico de los inventados por el Dr. Albert Abrams de San Francisco, considerado el padre de la radiónica instrumental. A la muerte del Dr. Pack le cede a Hieronymus dicho equipo por si puede aprovechar algunas piezas, fascinado por este instrumento y la misteriosa energía que le hacía funcionar comenzó sus propios experimentos. Uno de los experimentos más conocidos de los que realizó fue el de hacer crecer plantas en la oscuridad a través de transferir la energía del sol necesaria con placas metálicas colocadas en el exterior y conectadas con cable a unas placas sobre las plantas, lo que le hizo sacar como conclusión que había otro tipo de energía responsable del crecimiento independiente de la solar.
Él creía que todos los materiales emitían una energía especial que denominó “elóptica”, palabra compuesta de la palabra eléctrico y óptico, pues posee características de las dos. Las cajas de sus instrumentos estaban pintadas de negro, pues creía que la energía elóptica se acumulaba con este color, concepto que todavía se conserva en los nuevos instrumentos radiónicos actuales, sobre todo en las contemporáneas maquinas Hieronymus. Esta energía la emiten todos los objetos e interactúan con los organismo biológicos, es afectada por el magnetismo planetario y el universal, sigue las leyes de la óptica y las del electromagnetismo; como energía elóptica, se denomina esa energía universal que en otros momentos se le ha asignado el nombre de “oldica”, “orgón”, “éter”….

El editor de la revista de ciencia ficción “Astounding Science Fiction”, John W. Campbell desde finales de 1950 hasta principios de 1960 se mostró interesado en el aspecto mágico de la maquina diseñada por Hieronymus, creando un diseño en papel que según él sustituía al aparato físico en toda su funcionalidad. Esto alejó la relación que mantenían Campbell y Hieronymus, ya que a este último le parecía que hacía parecer sus investigaciones como supersticiones y retardaba la aceptación de sus hallazgos. A pesar de lo contrario que fue el propio personaje del cual hereda su nombre, la maquina Hieronymus simbólica es de gran popularidad entre los practicantes de la psiónica por su gran facilidad de creación. Existen modelos comerciales de dicho instrumento realizados en metacrilato y otros materiales, pero el que tiene interés se la termina fabricando él mismo en cartulina y plástico transparente.
Hieronymus fue un renovador de la radiónica y es todo un hito en esta, pues sus instrumentos permitían no solo el diagnóstico sino el tratamiento en un solo instrumento y con una simplicidad desconocida hasta entonces. Desde este inventor e investigador, no hay ninguna innovación significativa en la radiónica.