El péndulo cromático es un instrumento radiestésico muy útil para el diagnóstico y en la detección de las radiaciones de los objetos, aunque se utiliza el código de colores, se mueve en la gama tanto del espectro visible como el invisible. Los colores en radiestesia tienen una gran importancia, pues no solo indican la salud o carencias en el organismo, sino que también son útiles para determinar la efectividad de los instrumentos y gráficos emisores, así como el tipo de radiación que generan. También es denominado como “cono virtual”, pues la posición del disco que marca el color a detectar proyecta la longitud virtualmente sobre la punta, de un modo similar a como ocurre en los prismas de cristal.
León Chaumery y André de Belizal, fueron los que diseñaron y patentaron este péndulo en 1939, aunque no se comercializó hasta 1960 en la librería Desforges de Paris, que en 1990 volvió a relanzarlo. Estos dos célebres radiestesistas desarrollaron este péndulo como un sistema de medida y comprobación de las radiaciones emitidas, fruto de los muchos años de investigación en este campo. De ellos es también el “Péndulo Universal”, de más difícil manejo y aprendizaje. Se puede diagnosticar la carencia o necesidad de un color para el tratamiento y posteriormente emitirlo con algún instrumento psiónico, como por ejemplo la “Flecha Regulable” creada por Enel, el “Escargort – Selector“ de Bélizal y Morel, o el “El Disco Ecuatorial” de Jean de La Foye, incluso la pirámide empleando su distribución de colores. Chaumery y Belizal crearon otro péndulo similar al cono virtual, destinado a medir el sector radioactivo del espectro, con una detección total de 240 puntos; es el llamado “Detector IV-UV” difícil de encontrar y sin información de su uso.
Consta de una pieza central con los doce colores marcados, esta pieza en el diseño original es rectangular, pero en los diseños actuales suele ser cilíndrica, en todos los casos ambos extremos terminan en punta. Dispone de un disco que se desplaza por las marcas de los colores y que es fijado con un pequeño alambre o tope, mientras que en los modelos actuales una pestaña permite que quede fijo en su posición. Está sujetado por un cordel que en su extremo opuesto dispone de tres nudos o marcas para delimitar el área de detección. Las tres marcas en el hilo se sujetan con los dedos según se pretenda detectar un campo de medición u otro, las marcas se sostienen entre el índice y el pulgar con los dedos en vertical hacia abajo y deben ser ajustadas a cada persona. Puede ser utilizado sin sujetar los nudos, solo por el extremo del cordel, pero una vez calibrado es mucho más efectivo.
La marca o nudo superior sirve para trabajar con la onda de color o energía en general, la marca de en medio es para operar con energías sutiles o de onda forma, y la tercera marca es para funcionar en el área de las energías biométricas, que es la energía emitida por cualquier ser vivo. Se puede definir como campos de actuación, gama o frecuencia.
El péndulo o cono virtual dispone de un disco que se queda fijo en el color a explorar, si gira en el sentido de las agujas del reloj es que ha entrado en sintonía con el mismo. En cada uno de los extremos se encuentra el verde negativo que es una energía extraña, perjudicial en principio, pero útil en las máquinas y dispositivos psiónicos. Se representan los colores radiestésicos que se encuentran en una esfera, en donde el punto del ecuador corresponde con electromagnético o neutro, en el meridiano de dirección este-oeste se encuentra el espectro eléctrico, mientras que en el meridiano norte-sur se encuentra el espectro magnético. A este espectro de vibraciones se le denomina el “ecuador Chaumery-Bélizal”. La afinación respecto al color se consigue a través del disco que crea un ángulo respecto a las puntas similar al espectro de color en un prisma de cristal, de ahí la otra denominación de este instrumento como “virtual” y “cono” por la figura que genera la proyección del disco.
El modo más sencillo de familiarizarse con el uso de este tipo de instrumento es de poner un color, por ejemplo un papel azul, y sostener el péndulo por el primer nudo con el disco situado en la posición azul (Az). No hay que pensar en nada, con la mente totalmente en blanco, dejar que gire; si lo hace en sentido horario es que se ha conectado, si no gira o lo hace en sentido contrario es que se sostiene el péndulo mal o no está situado el disco en su posición adecuada. La intensidad y velocidad del giro denota la calidad del elemento sintonizado. El verde negativo es más lento de sintonizar, por lo que el péndulo puede tardar más en detectarlo, aunque esto depende del adiestramiento y sensibilidad del operador.
El orgón se detecta con este instrumento como una mezcla de los colores: índigo (I), ultravioleta (Uv) y verde negativo (-V). Se sujeta el péndulo por la marca más cercana al instrumento y se va poniendo el disco en cada uno de los colores, si gira en sentido horario en estos tres colores (I, Uv y –V) es signo certero de que hay orgón de gran calidad y beneficioso. Aunque hay elementos que emiten estos tres colores, el que los tres se encuentren juntos es un indicio claro. Hay aparatos y objetos que se distribuyen como generadores de orgón y no lo son, no significando que sean inútiles, sino que operan en otra gama como equilibradores de energía interna, pirámides o purificadores de cargas electromagnéticas. Las corrientes telúricas negativas, fallas o cavidades, se detectan con el disco en la posición de verde negativo (-V) y sujetando el péndulo por la marca central, que corresponde a la onda forma.
Para calibrar de modo personalizado los puntos, nudos o marcas que determinan el tipo de gamas de energía en las que se está operando se procede del siguiente modo:
• Situar el disco en la posición de verde positivo (+V), sostener el péndulo por su cordel a unos dos centímetros de la punta cónica superior; poner la mano por la palma hacia arriba y debajo de la punta inferior a unos pocos centímetros. Si es péndulo gira en el sentido de las agujas del reloj, hacer la marca en el punto donde se está sujetando; si no gira dejar correr un poco de hilo y volver a probar, así repetidamente hasta obtener el punto exacto. Repetir esta operación tantas veces como sea necesario, hasta estar completamente seguro. Este punto es el biométrico, cualquier ser vivo que no tenga una enfermedad degenerativa emite verde positivo.
• Para encontrar el segundo punto, el que corresponde a las onda forma se utilizar una pirámide bien orientada en el centro de su base dirección norte-sur, situando el instrumento en el ápice superior de la misma, debe girar en sentido de la agujas del reloj cuando entre en sintonía. Para ello se sujeta el cordel un poco por encima del primer punto con el disco en la posición de verde positivo (+V), ir desplazándose lentamente por la longitud de cordel hasta que gire, marcar la posición.
• El tercer punto es el destinado a detectar las ondas de color del espectro visible, para ello poner o situar el disco en la posición de un color determinado, situar debajo del péndulo una tarjeta u objeto del mismo color, ir desplazando los dedos con los que se sujeta por el cordel a un poco de distancia de la segunda marca y en la posición donde gire marcar este tercer punto.
Repetir este proceso de calibración en cada punto tantas veces como sea necesario, con paciencia y con la mente despejada, una vez bien calibrado, serán válidas las posiciones para su usuario durante al menos dos años.
El cono virtual o péndulo cromático es un instrumento de investigación imprescindible para abordar el fascinante terreno de los colores radiestésicos y las ondas forma. Así mismo supone una herramienta muy eficaz para el diagnóstico tanto en directo como a través de un testigo y un atlas de anatomía.