En la teoría de los campos de torsión es común el uso de imanes para generar el efecto de modificar la dirección de los espines y con ello conseguir un efecto energético, usado tanto para condicionar el entorno como para acciones no locales. En rusia existen y han experimentado a partir de la década de 1990 con distintos modelos de este sistema, sin embargo, esta idea de campos magnéticos en movimiento no es exclusiva de las investigaciones sobre torsión, existen distintos dispositivos similares en el campo de la radiónica. Es fácil construir y utilizar.

En la India el doctor B. Bhattacharya desarrolló todo un sistema de sanación basado en gemas, básicamente eran elixires de distintos minerales que se ingerían a modo de homeopatías. Se le atribuye la curación de una epidemia con un disco de plata girando que contenía siete piedras (rubí, diamante …) frente al que disponía las fotos de las personas a tratar. También utilizó imanes para la sanación como sistemas radiónicos, pero no hay constancia de que utilizase discos en movimiento con imanes. Bhattacharya estaba muy influido por la radiónica inglesa, en concreto por los experimentos de George de la Warr. De la Warr, aparte de seguir la estela de los sistemas de diales de la radiónica norteamericana, ideó sus propias derivaciones, en algunos de sus dispositivos de tratamiento incorporó imanes e incluso una barra de ferrita que giraba con un motor a 60 r.p.m., este dispositivo fue tratado en un artículo anterior que puede leerse aquí. A partir de estos dos pioneros, se han creado distintos dispositivos radiónicos que básicamente son un disco girando, con o sin imanes, con figuras geométricas a modo de onda de forma o con gráficos activos.

Por otro lado, en Rusia, en la línea de los campos de torsión, se han creado por aficionados e investigadores conjuntos de imanes con polaridad contrapuesta, que al girar varían el espín de entorno o, dicho de otro modo, modifican el espectro espacial. Esta última denominación se refiere al cambio de dirección de los espines del entorno provocado por el giro de los imanes. Estos sistemas básicamente son un motor, por ejemplo, el de un ventilador de ordenador, con imanes colocados con polaridad contrapuesta. Usualmente son cuatro imanes de neodimio cuyas caras se alternan en positivo, negativo, positivo, negativo atrayéndose entre sí. Teóricamente, a mayor velocidad, más efecto de torsión se produce, modificando el espectro energético del entorno; aunque esto sea real, un movimiento de un conjunto de imanes produce un efecto energético considerable.


Un modo de sencillo de hacer un dispositivo de este tipo es utilizando una tabla giratoria de las utilizadas para exponer objetos, estas son muy asequibles y fáciles de conseguir. A ésta se le pegan cuatro imanes enfrentados unos a otros atrayéndose. Nuestra versión está basada en un Arduino con un motor 28BYJ-48 con su correspondiente placa controladora ULN2003, que permite regular la velocidad de giro con un potenciómetro. Todo el conjunto es alimentado con adaptador de corriente de 220 a 9 voltios. Se ha incluido un led bicolor para indicar el cambio de giro que se realiza, girando el mando a la izquierda el color es rojo y la plataforma gira en el sentido de las agujas del reloj, y si el mando está a la derecha el giro es en sentido anti horario. En el punto central del potenciómetro se detiene y cambia de giro. La primera velocidad al cambiar el sentido de giro, su velocidad es muy baja, a 2,5 vueltas por minuto; según Wilhelm Reich ésta es en la que se mueve el orgón. Mediante algún tipo de test radiestésico o kinesiológico se puede determinar la velocidad. Montajes similares son fácilmente de encontrar en la red.

El conjunto consta de cuatro piezas impresas que hemos diseñado a propósito, aunque hay múltiples modelos similares disponibles en internet. Consta de una plataforma con espacio para los imanes y que se une al eje del motor con una tapa para cubrirla, una forma cilíndrica en la que se encuentra la electrónica con otra base para cerrar el conjunto. En la parte cilíndrica se encuentra el interruptor de encendido, el led bicolor y el potenciómetro para regular el sentido del motor.


Son distintos usos los que se le pueden dar a este sencillo instrumento, tanto en acción directa como a distancia con testigo. Para un efecto sobre el entorno, basta con situar el elemento del cual se quiere crear la tendencia encima de la plataforma y hacerlo girar en un sentido u otro; por ejemplo, para hacer una limpieza del lugar se pone turmalina y se hace girar en sentido horario, mientras que para una permanecía de la influencia del mineral, homeopatía o símbolo, se hace girar en sentido anti horario. En el caso de querer actuar a distancia se sitúa el elemento a emitir junto al testigo. La dirección de giro puede ser determinada por test radiestésico o similar, pero se recomienda que para acelerar un proceso se haga girar en sentido horario y que para retrasar o cargar una influencia, en sentido anti horario. Por sí solo, sin ningún elemento simbólico o físico en la plataforma, es muy efectivo para armonizar o renovar la energía del lugar.
En conclusión, una plataforma giratoria con imanes es un modo sencillo de crear campos de torsión, que puede ser utilizado como elemento de modificación del entorno y como emisor a distancia con testigo. Este es un instrumento muy asequible en su construcción para experimentar con las energías sutiles.